Nuestra historia
Mamashana se inició en el año 2012, en realidad nuestra historia se remonta a la niñez, la cocina fue un punto clave para el sustento familiar, nuestras madres y abuelas nos inculcaron la pasión por transformar el agua, el fuego, la sal, y todo lo que producía la tierra a través de nuestras manos, es decir, crecimos escuchando el tintineo de las ollas, el agua en ebullición y el crepitar del fuego.
Y aunque cada uno de los hermanos tomamos rumbos diferentes, un buen día nosotros decidimos dejarlo todo, para emprender con lo que más nos apasionaba. Después de recorrer algunos lugares de África, Asia, Europa y América; finalmente nos llamó la atención Nasca, había mucho por hacer, una ciudad misteriosa, tranquila y acogedora, con un clima y cielo envidiable, siendo un lugar con regular afluencia de turismo, pero sin muchas opciones en cuanto a gastronomía.
Creamos Mamashana restaurant, ambos con una misión de revalorar y mostrar la riqueza y singularidad de los productos peruanos. Introducimos el primer restaurante vegetariano y saludable, sin perder la sazón que caracteriza a la gastronomía peruana. También instauramos el primer restaurante en Nasca con terraza al aire libre en pleno corazón de la ciudad, para que nuestros visitantes puedan disfrutar del sol y su gente mientras degustan un buen café o .un tacu tacu.de frejoles.
Somos pioneros en utilizar en nuestras instalaciones, elementos que sean amigables con el medio ambiente, porque es nuestra prioridad como restaurantes sostenibles acreditados. Por todo ello nos sentimos complacidos de haber tenido un buen impacto en la hermosa ciudad de Nasca. Hoy en día los visitantes ya pueden disfrutar de más opciones a la hora de comer.
Aún queda mucho por hacer, ya lo decían nuestras madres…”La vida del gastrónomo es muy demandante, si no hay pasión, no hay éxito”. Somos la continuación de esas mujeres emprendedoras y valerosas como María Victoria, Pituca, Zenobia y María de los Ángeles, que en sus épocas de guerras y crisis, supieron hacerse de un espacio en la sociedad para dar sustento y alimentar a sus numerosos hijos…
Hoy en día, las hermanas Blanca, Cristina y Vilma, conjuntamente con Francisco (el asturiano), unimos nuestras perspectivas para continuar con nuestra pasión y sueño de nuestros ancestros.